Fuiste encontrado en una caja, de noche bajo la lluvia por las calles de La Matanza, desnutrido. Eras el más pequeño entre tus hermanos, y creímos que no lo lograrías, y saliste , porque te alimentó quién te encontró con mamadera.
Tus signos de desnutrición quedaron en tus huesos, y tu alma siempre quedó herida , temías a la calle, era tu enemiga.
Te recibí en tránsito con 1 mes de vida, y la idea era darte en adopción, pero desde que te puse bajo mi cuello para dormir a la noche, supe que no te irías de nuestro hogar.
Pasamos muchos problemas con tu conducta, por muchos veterinarios, adiestradores, paseadores, y hasta homeópatas, pero nunca pudimos cambiar tu miedo a la gente y a la calle....sólo tenías confianza en la famila, y en los que conocías.
Se que eras la clase de perro que todos hubiesen devuelto....pero te amamos y aceptamos que tu sufrimiento había dejado secuelas irreparables.....como tienen tantos otros en zoonosis y refugios y que nunca van a encontrar quiénes los acepten con esos traumas.
Hace 2 días que partiste, al cielo de los perros, y nos dejaste en la más triste soledad.
Necesito que sepas cuánto te quise, y que te llevaste la mitad de mi alma con vos.
Por siempre serás mi bebe.
Te amo Benjamín.
Laura.
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